El TEL o Trastorno Específico del Lenguaje es una condición que, básicamente, retrasa el aprendizaje del lenguaje, tanto en la incorporación de vocabulario como en su puesta en práctica. La población que más lo
padece es la infantil, abarcando un rango etario que va de los 3 a los 8 años, aproximadamente, y los profesionales que se encargan de la detección y corrección de esta condición son los avocados al área de fonoaudiología o logopeda.
¿Cuál es la causa del Trastorno Específico del Lenguaje?
Aunque son muchas las investigaciones que se están llevando a cabo en distintos puntos del mundo, todavía se desconoce la razón determinante de este trastorno. Sin embargo, cada vez son más las voces profesionales que afirman que existiría una estrecha relación entre este trastorno y la genética, puesto que un gran porcentaje de los niños que los padecen tienen antecedentes familiares. A pesar de esto, es imprescindible hacer hincapié en que quienes padecen TEL no tienen hipoacusia ni otro tipo de discapacidad.
Cabe destacar que las primeras personas que se percatan de esta patología suelen ser los padres o los maestros de nivel inicial, ya que suele tornarse evidente en los menores que tienen notorias dificultades para:
- Aprender nuevas palabras
- Pronunciar las palabras
- Conjugar verbos en su tiempo correcto
- Mantener conversaciones
¿Por qué es importante detectarlo a tiempo?
La comunicación es uno de los pilares de toda interacción social y es fundamental para poder desplegar y hacer crecer las habilidades en todos los ámbitos de la vida cotidiana que son sumamente importantes, como la escuela. Si este trastorno no es tratado correctamente, el paciente podría sufrir frustración, depresión y atraso académico significativo, entre otros.
En la actualidad se cuenta con un abanico de posibilidades que combinan la observación terapéutica y el juego para poder emitir un diagnóstico médico confiable. Por lo general, se emplean elementos lúdicos, como juguetes, canciones y otro tipo de interacciones, que ayudan al profesional a evaluar correctamente el nivel de comprensión del pequeño.
Una vez diagnosticado con TEL, ¿hay tratamiento?
Como se trata de un trastorno que atañe al lenguaje en cuanto a la lecto-comprensión, se diseñan programas educativos a la medida de las necesidades del menor. Sin embargo, se recomienda que el niño esté rodeado de pares que no compartan esta misma condición para que cumplan una función de modelo y así poder incentivar actividades grupales que tengan su base en el intercambio oral. Además, se suelen incluir tareas específicas de lectura y escritura más estructurados y metódicos para impulsar el desarrollo intelectual desde el hogar.
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